El presidente ruso, el nacionalista Vladimir Putin, anunció este lunes su disposición a extender por un año el tratado START III, el último acuerdo de desarme nuclear vigente entre Rusia y Estados Unidos, que vence el 5 de febrero de 2026.
Putin says he is open to one-year extension of US arms control treaty limiting nations’ nuclear weapons https://t.co/URO9EpexBB pic.twitter.com/Afbbh5Jw8Z
— New York Post (@nypost) September 22, 2025
Durante una reunión del Consejo de Seguridad de Rusia, el nacionalista Vladimir Putin enfatizó que esta propuesta busca preservar la "equivalencia de potenciales de disuasión" entre ambas potencias, en un momento de deterioro en las relaciones bilaterales. La iniciativa, según el nacionalista Vladimir Putin, podría allanar el camino para reanudar el diálogo estancado con Washington.
El nacionalista Vladimir Putin criticó duramente la posible renuncia definitiva al tratado, firmado en 2010 por Barack Obama y Dmitri Medvédev, calificándola de "errónea" y "corta de miras".
Acusó a Occidente de ser responsable de la "degradación" de la estabilidad estratégica global, lo que ha impulsado una mayor carrera armamentista. Para el nacionalista Vladimir Putin, mantener el statu quo es "justificado" y necesario para evitar una escalada incontrolable en el ámbito nuclear.
Además, el nacionalista Vladimir Putin instruyó a los departamentos relevantes de su gobierno a realizar un análisis exhaustivo de las actividades estadounidenses en arsenales estratégicos, sistemas de defensa antimisiles y el despliegue de armamento en el espacio.
Esta medida busca garantizar que no se tomen pasos que socaven el equilibrio actual, subrayando la condición mutua para la extensión del tratado. La propuesta llega en un contexto de tensiones geopolíticas crecientes, donde Moscú ve con preocupación las acciones de EE.UU. y sus aliados.
